miércoles, 5 de marzo de 2008
Signos de puntuación
http://www.memo.com.co/fenonino/aprenda/castellano/castellano46.html
También hay información sobre lpalabras homónimas, antónimas, la tilde, etc., que os vendrá muy bien para repasar.
lunes, 3 de marzo de 2008
Clases de Predicado: Predicado Nominal y Predicado Verbal
Juan es un niño muy simpático.
Pedro tiene un caballo de cartón.
Tu amigo malagueño parece un poco enfadado.
No sabe nada de ti.
Los jóvenes de hoy están muy contentos con las actividades deportivas.
Mañana nos iremos de excursión.
Esta tarde hay una buena temperatura.
Mis mejores amigos de la infancia eran muy divertidos.
2.- Analiza los sintagmas nominales que encuentres en las oraciones anteriores.
3.- Separar las oraciones de los texto A y B y di cuál es el sujeto y cuál es el predicado. Marca con SV- PN los Sintagmas Verbales que sean de predicado nominal. Di también cuál es el atributo. Analiza el atributo.
TEXTO A
Así amaneció mi octavo día en el mar. Fue una mañana tempestuosa. Si hubiera llovido no hubiera dispuesto de fuerzas para recoger el agua. Pero sentía que la lluvia me habría tonificado. Sin embargo, no cayó ni una gota, a pesar de que la humedad del aire era como un anuncio de la lluvia inminente. El mar seguía picado al amanecer. No se calmó hasta después de las ocho de la mañana. Pero entonces salió el sol y el cielo recobró su color azul intenso.
G.Márquez: Relato de un náufrago
TEXTO B
La línea del ferrocarril corre sobre una cornisa de la sierra entre dos túneles, y el pueblecillo descansa en el fondo de un circo de cerros cuajados de pinos. En el fondo del valle, rodeando el pueblo, hay praderas, donde pastaban unas cuantas vacas. Visto desde lo alto de la estación, le invadía a uno una honda sensación de paz. Las vacas sentadas rumiaban perezosas, el aire se movía suave, saturado de esencia de pino, el cielo azul encendido de sol estaba en calma, ausente el viento. Cuando una de las vacas levantaba la cabeza, el aire trasmitía hasta nosotros el sonido claro y suave de su esquila.
ARTURO BAREA: La forja de un rebelde